Salir

del círculo

rompiendo la continuidad

aunque parezca que la línea

rebase el centro de su forma

como la gota

que cae interrumpidamente

igual que caen las palabras

cuando son manejadas como espacio

y llenan huecos evidentes

que como cataratas van vaciándose

de arriba abajo

de lado a lado

de abajo a abajo

hasta llegar a lo hondo

del centro de la nada.

Y mientras tanto

escapar de lo dicho

pues sólo es entendible aquello

que deja marca.

Esa

es la continuidad

la marca

que hace que toda gota

tenga forma distinta

pues cada una es enlace

de la anterior

y la siguiente

con la continuidad

en medio

pero sin alterar las partes

como un ladrillo

que aguanta el peso incluso

desconociendo el lastre de la malla

que embrida el uno con el otro

y así haciendo sucesión

donde todo es la suma de uno y uno.

 

Eso es un muro.

 

Aunque también continuidad

o marca que hace que la red

vaya encerrando / se

tanto que finalmente

quede algo que podríamos llamar

nada

nuevamente.