Cuando pronuncio la palabra silencio,
lo destruyo
Wislawa Szymborska
Lo que la Sospecha cree oír cuando nada se escucha
ni anda desnuda la Evidencia detrás de las puertas.
Lo que se calla el algodón, lo que la nieve se guarda.
Lo que la sordina pretende de la trompeta.
Lo que el silenciador exige a la pistola.
Lo que el dedo índice solicita de los labios.
Aquello que el mudo le dijo al sordo no lo debiste contar
si a estas horas pretendías todavía conservarlo.
El sigilo del que roba guantes con manoplas de lana,
del que tapa con resina los agujeros de las flautas.
El mutismo del que calla, la reserva del que otorga.
El silencio encendido de las casas vacías
y el eco sofocado de las cosas llenas.
Los secretos llevados de la alcoba a la tumba.
En carrozas funerarias. Con ruedas forradas de felpa.
Un crespón negro sobre la mordaza blanca.
Un minuto de ruido por el Silencio muerto.